Alcudia es un precioso y muy hogareño pueblo de Mallorca, famoso por la gran afluencia de visitantes (la gran mayoría extranjeros) que vienen atraídos por la simplicidad de sus callecitas, todas ellas recordando paso a paso la esencia de Mallorca.
Podríamos decir que la estancia en Alcudia es siempre tranquila, se vive como si de una gran familia se tratase, todo el mundo conoce al vecino y se respira hospitalidad allá a donde vayas.
Cuenta con una bonita y extensa plaza principal, donde a parte de muchas tiendecitas y algunos bares, los domingos podremos encontrar un mercadillo de frutas, verduras y “otros”.
Una de las cosas que hacen a Alcúdia tan única son sus murallas, que rodean todo el casco antiguo del pueblo y se conservan a la perfección.
A pesar de ser un pueblo relativamente alejado del centro, cuenta con todas y más comodidades, desde un supermercado de grandes dimensiones hasta uno de los famosos Müller donde podremos encontrar desde cosméticos hasta discos de rock y material escolar.
Además lo que hace tan famoso a este pequeño pueblo es su puerto, el Puerto de Alcúdia, donde podremos encontrar una preciosa playa, quizás no tanto como la de Es Trenc, o Ses Salines, pero sin duda una de las playas que año tras año miles de visitantes eligen como favorita. Rodeada, por supuesto, de miles de tiendas de souvenirs y algún que otro minimarket para acabar con la sed en las altas temperaturas.
También cuenta con varios restaurantes con vistas al mar y algún que otro puesto de gofres, helados, granizados, etc dependiendo de la época del año
Como ya hemos mencionado, su playa no es equiparable a la de Es Trenc pero es sin duda una segunda opción muy buena y que todos deberíamos considerar de vez en cuando.